Desde el año 2020, muchos trabajadores por cuenta propia han venido percibiendo una serie de subvenciones con el fin de paliar los efectos negativos de la pandemia Covid-19 y, así, evitar el cierre de sus negocios. Esta situación puntual abre una cuestión de interés general: ¿hay que declarar las ayudas públicas a autónomos? Con el inicio de la campaña del IRPF de 2022, conviene explicarlo detalladamente para no cometer errores ni obviar datos en tu declaración.
Un breve repaso a la situación…
De acuerdo con las autoridades fiscales, ciertas prestaciones y subvenciones sí tributan. Esto significa que debes incluirlas en tu declaración si las percibiste entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de 2022. En particular, debes consignar el concepto y la cuantía de las ayudas que recibiste a lo largo del año 2022. Sin embargo, hay otras que no debes incluir, así que es importante que prestemos atención.
Ayudas a autónomos que tributan en el IRPF
Prestación extraordinaria por cese de actividad
Se considera rendimiento del trabajo. Por tanto, los primeros 2.000,00 euros están libres de impuestos de conformidad con lo dispuesto en la letra f del apartado 2 del art. 19 de la Ley 35/2006, de 18 de noviembre, del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (LIRPF, en lo sucesivo); no así los siguientes. De este modo, tienes que declarar todas las prórrogas que hayas solicitado durante el año pasado (hasta un total de cuatro).
Ayudas de fomento a la solvencia empresarial
Por su parte, las ayudas a la solvencia empresarial no están exentas de tributar, cualquiera que sea su ámbito geográfico estatal, autonómico o local. De esta forma, entran en la categoría de subvención y deben aparecer encuadradas como tal. Concretamente, se corresponden con un rendimiento de tu actividad económica (ingresos por subvenciones corrientes).
Resto de subvenciones
El resto de subvenciones corrientes o no corrientes, por su propia naturaleza, se incluyen en tu declaración. Algunos ejemplos son las subvenciones al emprendimiento, si eres nuevo empresario, o las de fomento del trabajo autónomo.
Ayudas a autónomos que no tributan en la renta
En cambio, la capitalización del paro para emprender una actividad económica por cuenta propia, está exenta del IRPF (letra n) del art. 7 de la LIRPF).
¿Hay que tributar las ayudas no cobradas hasta 2022?
De acuerdo con el criterio marcado por la propia Agencia Tributaria, se tributa por las ayudas efectivamente recibidas, no por las solicitadas, ni siquiera por las reconocidas, aunque exista resolución concesionaria. Entonces, ¿qué sucede si solicitaste una subvención en 2021 y la recibiste este año? Lo cierto es que no tienes que tributar por ella en esta declaración, pero sí en la de 2022 (que confeccionarás en 2023).
En resumen, habrá que estar a su calificación y fecha de devengo para concluir si existe obligación de declarar las ayudas públicas.